La metodología a utilizar para inicio de las clases virtuales 2020 es muy diferente para muchos educadores, este año escolar se vislumbra con el aprendizaje continuo a distancia implementado. En lugar de decorar los cursos de anuncios y planificar los espacios didácticos, la mayoría está descubriendo cómo brindar experiencias de aprendizaje interesantes y significativas para sus estudiantes en línea.

 

El cambio inesperado al aprendizaje a distancia en la primavera reveló que muchos educadores no estaban preparados para enseñar en línea. Más de la mitad de los profesores dijeron que no se sentían preparados para facilitar el aprendizaje a distancia, según el informe sobre cómo los profesores están recurriendo a la tecnología en medio de cierres de escuelas vinculados a coronavirus.

 

Hoy en día, muchos maestros están saliendo de su zona de confort para aprender nuevas herramientas y estrategias de enseñanza en línea. Se trata de saber crear un entorno que enriquezca el aprendizaje de los alumnos y contribuya a una enseñanza eficaz, incluso si se realiza en Internet.


A continuación, se te presentamos cinco consejos que los para que puedas elaborar tu primera clase virtual

 

1. Prepare su espacio de trabajo en casa


Crear un espacio designado para trabajar y enseñar en línea es esencial para los educadores que trabajan desde casa. Esto puede ayudarlos a mantenerse productivos y concentrados durante el día y minimizar las distracciones que pueden interferir con el aprendizaje de los estudiantes.


Los profesores no necesariamente necesitan tener una oficina en casa o adaptar una sala existente a una. Algunos han invertido en nuevos equipos, como cámaras profesionales, auriculares y pizarras blancas para proporcionar instrucción sincrónica y asincrónica de mejor calidad. Sin embargo, hacer pequeños ajustes, desde mudarse a una habitación bien iluminada y despejada, a transmitir en vivo o grabar una lección, hasta usar una pila de libros para elevar una cámara web al nivel de los ojos cuando videoconferencia: puede marcar una gran diferencia en la calidad de la educación en línea.

 

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2. Pon a prueba tu tecnología antes del inicio del curso

 

Los maestros también deben estar al tanto de los problemas técnicos comunes que ellos o sus estudiantes pueden encontrar durante el aprendizaje en línea, como micrófonos que no funcionan correctamente o videos incrustados que no se reproducen en presentaciones. Esto es especialmente importante ya que muchos departamentos de TI están abrumados por resolver solicitudes más urgentes y mayores desafíos ahora que las escuelas están muy distribuidas.

 

Es una buena idea que los profesores realicen una prueba de audio y video en cualquier dispositivo o plataforma que vayan a utilizar. También deben considerar revisar sus lecciones antes de transmitirlas o grabarlas. Seguir estos pasos puede ayudar a minimizar la cantidad de resolución de problemas que tienen que hacer durante el día y puede ayudarlos a sentirse más preparados y confiados en la educación en línea.

 

3. Definir las expectativas, metas y rutinas del aula


Incluso si los estudiantes no están físicamente en un salón de clases, los maestros aún deberán establecer expectativas claras para sus clases. Emily Kirsch, entrenadora de tecnología de instrucción en Educate, le dice a EdTech que establecer estándares y metas en el aula con los estudiantes los alienta a tomar posesión de su aprendizaje y fomenta entornos de aprendizaje productivos.


Muchas escuelas han establecido expectativas y pautas para los estudiantes al usar dispositivos, plataformas de videoconferencia y otras herramientas digitales proporcionadas por la escuela. Los maestros también crearon carteles y presentaciones para compartir con Google Classroom, Microsoft Teams o su sistema de gestión de aprendizaje preferido para ayudar a los estudiantes a navegar en su nuevo entorno de aula.

 

4. Elije la aplicación correcta para impartir tus clases.


Existen un número amplio de aplicaciones para realizar tus clases, aplicaciones de videoconferencia, chats, correos, entregas de informes por lo cual es importante que selecciones la aplicación que más de adecue al contenido o actividades a realizar.

 

5. Proporcionar herramientas de comunicación y encuestas.

 

Las líneas abiertas de comunicación son esenciales en un aula virtual, especialmente ahora que las conversaciones cara a cara son limitadas. Al proporcionar una comunicación accesible y constante, los maestros pueden mantener informados a los padres y tutores sobre las últimas noticias escolares o el progreso de sus estudiantes. También permite a los educadores monitorear a sus estudiantes y asegurarse de que se satisfagan sus necesidades sociales y emocionales.

 

Además de las llamadas telefónicas, los correos electrónicos y los mensajes de texto estándar, los maestros pueden publicar actualizaciones de la clase y programar reuniones individuales utilizando su LMS para agilizar todas las comunicaciones y reducir la necesidad de soporte de TI adicional.

 

 

También es importante recopilar comentarios de los estudiantes y sus familias para identificar áreas de mejora. Con encuestas en línea como Google Forms y aplicaciones como Seesaw, Kahoot y Flipgrid de Microsoft, los maestros pueden hacer preguntas sobre las experiencias en línea de los estudiantes en el aula. También pueden recopilar datos valiosos, como cuándo los estudiantes hacen sus deberes en línea y cuánto tiempo les toma completarlos, y usar esos datos para refinar la forma en que preparan y entregan sus lecciones.


Configurar un aula completamente virtual no es una tarea fácil, especialmente para los profesores que no están familiarizados con las herramientas en línea. Pero estar abierto a nuevas formas de utilizar la tecnología para el aprendizaje puede acercar a los profesores un paso más a hacer que el aprendizaje en línea sea más accesible, atractivo y eficaz para todos los estudiantes.